UNA DECISIÓN DIFÍCIL

Con este post quiero compartir con vosotros lo que me ha sucedido a dos días de comenzar mi nuevo proyecto profesional.

Sabemos como está la situación económica del país y lo difícil que está encontrar trabajo. Por ello, yo hace unos meses decidí cambiar, como lo hace mucha gente, y emprender un proyecto profesional que siempre he tenido en mente y que por una razón u otra no pude llevarlo a cabo. Con el apoyo de mi familia me he aventurado a crear mi empresa, crear mi propio puesto de trabajo e intentar salir de la crisis.Se que es muy difícil, pero tengo que intentarlo, por mi, por mi familia, por todos  los que creen en mí.

Todo iba rodado, invesiones, gastos, trabajo, esfuerzo, responsabilidad, acuerdos, etc...y a dos días del comienzo me llaman para una entrevista de trabajo. ¡Si una entrevista de trabajo después de un año!. Y en un puesto similar al que ya había estado durante años.

En un día paso 3 entrevistas y me dicen que soy candidato al puesto. Pero  señores ¡estoy a falta de dos días de empezar mi nuevo reto profesional! Los papeles preparados, la publicidad preparada, la página web creada y subida

¿Qué hago?

No puedo creer lo que me está pasando. Tengo que decidir y tengo que decidir ya. Que hago si en época de crisis no hay trabajo y me están ofreciendo uno. ¡qué hago! no se qué hacer. La cabeza y el corazón luchando,

¡qué hago!

Por la cabeza me pasan miles de cosas como el trabajo hecho hasta ahora, las inversiones realizadas económicas y personales, la familia, los hijos, el futuro, los acuerdos  cerrados, los compromisos con amigos, los clientes, la ilusión, la vocación, el futuro incierto, el emprendimiento, la inseguridad, etc.....

¡Qué hago! No puedo más, no le deseo a nadie estar en esta situación.Tengo que decidirme.

En estos meses he estado buscando dentro de mí si realmente soy un emprendedor. Gracias al apoyo de mi familia he podido tomar decisiones díficiles en relación a mi proyecto, a mi idea. La vocación, las ganas de aprender, de enseñar también me han ayudado.He compartido mi idea con la gente que admiro y con la que no, les he pedido consejos  y todos me han animado.

Gracias a mi familia, a mis amigos, a todos los que han creído en mí, gracias a mi corazón, a mi ilusión, a mi vocación he podido elegir y así lo he hecho.

He elegido creer en mi proyecto

a pesar de la crisis, y creer en mí. No se si saldrá bien pero tengo que intentarlo, para ello tengo una máxima, TRABAJAR, PERSEVERAR Y NUNCA PERDER LA SONRISA ya que tu familia, clientes, amigos, etc te lo AGRADECERÁN.
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